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Donde tienes puesta tu mirada?

  • Daniela Boschi
  • 17 may 2017
  • 2 Min. de lectura

Hola a todos!

Bienvenidos a este espacio de reflexión.

En el artículo anterior había partido de un proverbio ruso que decía: "Vive en tu pasado y perderás un ojo, pero olvida tu pasado y perderás los dos", que se refería a nuestra relación con el pasado, que si vivimos pendiente de el estaremos medio ciegos, y si lo olvidamos quedaremos ciegos totalmente. (1)

Hoy traigo otro pasaje, esta vez de la Fábula Espiritual, "El Monje que vendió su Ferrari":

Un chico se fue de su casa a estudiar con un reputado maestro. Cuando conoció al viejo sabio, le preguntó: "Cuánto tardaré en ser tan sabio como tú?". La respuesta no se hizo esperar: "Cinco años", "Eso es mucho tiempo", replicó el muchacho. "Y si trabajo el doble?", "entonces tardarás diez", contestó el maestro, a lo que el muchacho protestó: "Es demasiado tiempo, y si estudio también por las noches?", "quince años", dijo el sabio. "No lo comprendo", replicó el chico. "Cada vez que prometo dedicar más energías tu me dices que tardaré más en lograr mi objetivo. Por qué?". "La respuesta es muy sencilla. Si tienes un ojo puesto en el destino que esperas alcanzar, sólo te queda otro para que te guíe en en viaje". (2)

Los dos pasajes los traigo juntos, porque me llamó la atención que ambos tienen la mirada sobre el tiempo... no nuestra vista, sino nuestra mirada, nuestro enfoque, nuestras energías... pero además haciendo énfasis sobre los efectos negativos sobre concentrarnos demasiado en el futuro, y como manejamos nuestro pasado.

Como moraleja de cada uno de estos pasajes, pero sobre todo de la interpretación de los dos juntos, es sin duda que debemos concentrarnos en el presente, disfrutarlo a cada instante, mirar con los dos ojos hacia el presente. Aunque mi lectura es que este vivir el presente está planteado desde una forma consciente y responsable. Por qué? Si miramos con un ojo hacia el pasado, estaremos perdiendo visión para estar en el presente, viviremos el presente medio ciegos; pero si lo olvidamos, estaremos condenados a repetirlo; y si nos dedicamos de lleno al futuro, y ponemos todas nuestras energías en ese futuro, tendremos solo un ojo en el viaje, en el camino para que nos guíe, pero no quiere decir que no planifiquemos un futuro, que no pensemos en nuestro mañana...

Recordemos nuestro pasado, proyectemos nuestro futuro, pero con los dos ojos en nuestro presente. La forma de disfrutar el bienestar es tener recuerdo, tener esperanza y disfrutar a pleno del presente.

(1) https://danielaboschicoach.wixsite.com/misitio/single-post/2017/04/30/El-perd%C3%B3n

(2) El Monje que vendió su Ferrari - Robin S. Sharma


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